La Mirada Puesta en el Sueño
Crecer siempre ha sido la vocación de Mathiesen. El actual escenario global y regional hace esta tarea más difícil y retadora. Factores como:
- Precios de las materias primas y fletes marítimos extremadamente volátiles.
- Economías regionales en desaceleración y con alta inflación.
- Altos niveles de riesgo político local y también geopolítico.
Son algunos de los desafíos coyunturales que se unen a las tendencias estructurales que enfrentamos en los últimos años, con una creciente importancia del uso de tecnologías de la información en nuestro negocio y una mayor intensidad en la lucha por captar y retener a los mejores profesionales.
Es en este contexto que el equipo gerencial de Mathiesen se reunió la última semana de octubre en la localidad costera de Zapallar, Chile, para planificar el negocio para los próximos 5 años.
No pretendemos ser adivinos y muy posiblemente la realidad demostrará ser muy distinta a los escenarios que nos planteamos, pero sin duda fue muy provechoso reunirnos, pues tuvimos la posibilidad en conjunto de:
- Analizar la situación actual.
- Escuchar la voz experta de asesores internacionales en temas de la industria química y fletes internacionales.
- Analizar desafíos comunes que enfrentamos en toda Latinoamérica y situaciones particulares de cada país con las que tendremos que lidiar.
- Revisar el valor que creamos para nuestros clientes.
- Identificar las palancas del crecimiento que buscamos.
Nuestro sentimiento tras esta reunión es que salimos fortalecidos, con una perspectiva más clara. Seguros que Mathiesen, como sólido distribuidor regional, tiene mucho que ofrecer a nuestros clientes y proveedores, quienes en este escenario de alto riesgo pueden confiar su abastecimiento oportuno y la distribución de sus materiales en manos de expertos que conocen bien las tendencias mundiales y las realidades locales de cada mercado donde operamos, aportando soluciones logísticas y productivas de manera integral y ágil.
Pero no sólo hablamos de negocios, sino que afiatamos el trabajo en equipo. Luego de 3 años, volvimos a vernos en persona, a abrazarnos, a reír juntos. Aprovechamos la ocasión para juntarnos e interactuar más íntimamente con nuestros compañeros de distintos países, muchos de los cuales se incorporaron durante la pandemia y sólo habíamos tenido la posibilidad de verlos por pantalla.
El negocio nos presenta desafíos, nuestra cultura es de ponernos retos ambiciosos, pero siempre disfrutando, estando contentos y orgullosos de pertenecer a un gran equipo humano, ¡al mejor equipo!