¿Alcohol líquido o en gel, cuál es la mejor alternativa?

El uso de alcohol para una adecuada desinfección de manos y superficies en general, se ha vuelto una práctica necesaria debido a su eficacia para evitar contagios.

Los sanitizantes en base a alcohol se caracterizan por la rapidez de acción para desactivar una gran cantidad de microorganismos nocivos; mata entre un 99,990% y un 99,999% de las bacterias en un minuto y es un efectivo viricida y fungicida.

El alcohol actúa destruyendo la membrana celular, por reducción de su tensión superficial, y desnaturalizando las proteínas. Su eficacia está basada en la presencia de agua, ya que así penetra mejor en las células y bacterias permitiendo el daño a la membrana y rápida desnaturalización de las proteínas, es por lo que se recomienda utilizar alrededor del 70% en los productos para desinfección. Dado esta alta concentración, se debe tener en cuenta que estos productos se clasifican como líquidos inflamables, por lo que se deben tomar precauciones adecuadas para que su uso y almacenamiento sean seguros.

El uso del alcohol líquido tiene la ventaja de ser rápido y de amplio espectro, sin embargo,  no es la mejor opción para nuestras manos ya que resulta agresivo a la piel y puede causar trastornos como dermatitis y resequedad, por lo que su uso está orientado para la desinfección de superficies como monedas, celulares, manijas, volantes de autos, teclados, muebles de oficina, en general superficies con las que vayamos a estar en contacto. Para contacto con la piel lo recomendado es el uso del alcohol en gel.

Ventajas de gel sanitizante:

1. El formato gel permite adicionar agentes humectantes y emolientes para el cuidado de la piel.
2. Es lo más adecuado cuando no tenemos disponible agua y jabón. Recuerde debe contener al menos un 70%  de alcohol para garantizar la desinfección.
3. No necesita enjuague.
4. Es más seguro para los niños.
5. Tiene bajo riesgo de generar irritaciones y reacciones alérgicas.
6. Hay menos pérdidas por evaporación haciéndolo más estable en el tiempo de vida útil.
7. Es de fácil manipulación y aplicación ya que permite extender uniformemente el producto sobre nuestras manos evitando pérdidas por derrame y evaporación.
8. Se disminuye el riesgo de inflamación.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una adecuada higiene de manos con agua y jabón representa una de las medidas de prevención de infecciones y de contagio de enfermedades más efectiva, sin embargo, resulta inviable aplicar esta práctica sanitaria con la frecuencia requerida durante las actividades diarias; debido a esto,  es fundamental el uso de productos desinfectantes como el alcohol gel para complementar la necesidad de sanitización y los hábitos higiénicos.

Se recomienda que por cada cuatro aplicaciones de alcohol en gel  exista al menos un lavado de manos para evitar que se fijen gérmenes en la piel.

Si necesita ayuda en la formulación de alcohol gel y/o en el abastecimiento de materias primas envíenos su consulta y uno de nuestros expertos le responderá a la brevedad.